La imposición del homosexualismo militante

La imposición del homosexualismo militante

Por: Dr. Félix Muñoz

"Pero antes de que se acostaran, los hombres de la ciudad, los hombres de Sodoma, todo el pueblo junto, desde el más joven hasta el más viejo, rodearon la casa. Y llamaron a Lot y le dijeron: — ¿Dónde están los hombres que vinieron a ti esta noche? Sácanoslos, para que los conozcamos. Entonces Lot salió a ellos a la puerta, cerró la puerta detrás de sí - Gn 19:4-6 (BMH)".

Para conocer correctamente este verso hay que comprender que es un eufemismo para referirse a la relación sexual. Esta actitud va contra las leyes sagradas de la hospitalidad, pero, a la vez, resalta una práctica depravada de esta gente (cf. 18:20). La ley mosaica castigaba con muerte la práctica homosexual (Lev. 18:22; 20:13; Deut. 23:17, 18). El Código de Hammurabi admitía la práctica homosexual entre los que prestaban su servicio sexual en favor de los templos paganos. En base a la expresión eufemista arriba mencionada, en si. Un eufemismo es una palabra o expresión con que se sustituye a otra más grosera, impertinente, violenta o que se considera un tabú. Entonces, el verso expresa una acción violenta y grosera con inclinaciones sexuales aberrantes (pidieron de manera grosera e irrespetuosamente violenta el placer sexual). En tales ciudades querían obligar a Lot a que entregaran a sus hospedadores de manera apasionada para tener relaciones sexuales con ellos. Históricamente, la visita de los ángeles a Sodoma era para determinar si había alguien justo allí. La fórmula legal del (v.4) deja en claro que todos los hombres de la ciudad enfrentaron a Lot por sus huéspedes. Además del hecho de que la homosexualidad era considerada una ofensa capital, su negativa a escuchar la voz de la razón y su unánime insistencia a la violencia cuando se abalanzaron sobre la casa, eso confirmo el destino de la cuidad.

La mala reputación de Sodoma es rápidamente confirmada. En vez de saludar a sus visitantes, los sodomitas (nótese que todos los hombres de la ciudad están involucrados) quisieron violar imponentemente a sus visitantes. En la hospitalidad oriental convencional no se podía permitir que los invitados fueran sometidos a una violación homosexual. Las sociedades antiguas a veces aceptaban la homosexualidad entre adultos por mutuo acuerdo; pero la violación de los derechos, especialmente de huéspedes, siempre se consideraba como mala, en este caso la maldad era tan grabe que querían imponerla a como dé lugar sin respetar derecho alguno.

Al observar el (v.6) la actitud de Lot resulta muy incomprensible y cruel al lector actual. Sin embargo, Lot actúa de acuerdo con las leyes hospitalarias del antiguo Oriente, que exigían a un anfitrión defender a quienes se cobijaban bajo su techo, aun con la vida misma. En este caso, de acuerdo con sus leyes, Lot estima más valiosa la vida de sus huéspedes que el honor de sus hijas. Un caso semejante se encuentra en Jueces 19:1-30. Lot tenía una actitud correcta, una defensa al orden y la verdad cueste lo que cueste que no le importaba sacrificar lo que fuera para que así se ejerciera.

Es importante entender que existen tres tipos de homosexuales, 1) Pasivos: tales son los que se mantienen en el anonimato porque aceptan su condición y no desean ser aceptados por los demás, 2) Arrepentidos: son los que no aceptan su condición y se sienten incomodos con sus inclinaciones pero siempre ceden a la misma y se mantienen en el mismo ciclo de vida, y 3) Militantes: son los que aceptan su condición, les gusta y desean que el mundo entero acepte la misma, sea como sea, e incluso desean que los demás no solo acepten su inclinación, sino que participen de la misma a como dé lugar. Es importante a notar que en los tres casos no es necesario tener relaciones sexuales para para ser homosexual, con el deseo basta. El homosexualismo en sí, se puede catalogar como una malformada identificación con el Creador y por consecuente con su propio genero sexual. Ese era el caso de Sodoma, eran militantes sin ningún tipo de identidad con Dios y con su mismo género sea masculino o femenino (Rom 1:25-27). Tratando de romper el derecho ajeno y buscando ser aceptados en el suyo propio.

Hoy día podemos observar la misma conducta depravada, los cuales utilizan el medio audio visual (Prensa, Televisión y Radio) para imponer al mundo una aceptación obligatoria e incluso la práctica abierta de la misma. Tanto así, que el sistema religioso, educativo, legislativo, judicial, y ejecutivo de muchos gobiernos a nivel mundial, han adoptado tales conductas como una práctica alternativa aceptable.

¿Es correcto esto ante los ojos de Dios? ¿Cuál debe ser la postura del creyente ante tal movimiento modernamente fuerte? Primero, Dios ve tal práctica como una desagradable como bien menciona (Rom 1:25-27, 1 Cor 6:9-10) ya que la misma viola el orden divinamente establecido (Gen 1:27) y está en contra de tal ley natural, aunque afirmen haber nacido así biológicamente, no hay evidencias científicas para tales argumentos, los cuales buscan justificar su inclinación. Segundo, la postura del creyente ante tal inclinación pecaminosa debe ser con la verdad, cueste lo que cueste, pase lo que pase, al igual que Lot, una defensa al orden divino sin importar el sacrificio que se deba hacer. Hoy día vemos muchos predicadores prominentes aceptar esta conducta incoherente, tales personas se han desviado de la verdad y han tomado la misma como un escudo protector a sus intereses personales, evadiendo con ello cualquier sacrificio a causa de la verdad Divina.

El creyente debe estar parado firmemente en la verdad escrita (Palabra de Dios/Biblia), aunque la corriente de un sistema mundano el cual es gobernado por Satanás trate de imponer esa práctica como correcta cunado no es así. La postura real del creyente verdadero de Jesucristo debe ser, amar a tales personas, con el amor del Señor, pero no aceptar tales inclinaciones como verdaderas en el orden de la creación.