Ya no hay ninguna duda de que Francis Chan se ha apartado del evangelismo cristiano bíblico.
Ya se sabia que se asocia con herejes y apóstatas de rango. Hace tiempo que se sabe que Francis Chan ha estado en el camino equivocado durante bastante tiempo.
No solo sobre la asociación de Chan con falsos maestros en el movimiento carismático como Benny Hinn, Todd White, y Shawn Bolz. Chan siguió con una excusa afirmando que aunque no está de acuerdo con algunas de las enseñanzas del evangelio de la prosperidad, un falso evangelio en una reciente Conferencia de envío en el que participó, tenía la intención de usarlo como una plataforma para compartir la verdad.
Ahora, Chan lo ha llevado un paso más allá. Chan se ha unido a la madre de las rameras y está dando su total aprobación al catolicismo romano mientras se sienta, se quita los zapatos y permite que los sacerdotes católicos oren por él en la conferencia ecuménica OneThing.
La Conferencia OneThing se celebra anualmente en IHOPKC, la carismática iglesia dirigida por Mike Bickle fuera de Kansas City.
Cuando Chan invitó a los sacerdotes al escenario a orar por él, se hablaron unos de otros como “hermanos” que participan juntos en la Eucaristía (una perversión católica romana de la Cena del Señor ) y discutieron el deseo de estar unidos en su “ fe común”.
En un momento, un sacerdote católico comenzó a cantar la oración del Señor de la manera en que se canta en una misa católica romana mientras Chan se sentaba allí con la cabeza inclinada. Toda la congregación se unió al canto repetitivo.
Chan se niega a entregarle el evangelio a un católico porque “el Espíritu Santo no quiere que lo haga”. Toda la prueba fue muy extraña.
En la misma conferencia ecuménica se quita los zapatos y los calcetines para que un grupo de sacerdotes católicos romanos puedan rezar sobre sus pies. Además del hecho de que eso fue extraño y grosero, ciertamente no hay una base bíblica para el acto, pero que un grupo de hombres que niegan el evangelio bíblico realice tal acto es, bueno, extraño.
En la sesión de preguntas y respuestas, una mujer que se identificó como católica romana llegó al micrófono, expresando que ella cree que ella y Chan comparten el mismo corazón y le preguntaron:
Como estamos en esta iglesia, siento que este reinicio también es para los católicos y para toda la iglesia. Este es un llamado para que todos nosotros profundicemos en el corazón del Señor. Al reflexionar sobre eso y al tratar de entrar en algunos de los desafíos en nuestra propia iglesia, solo quería preguntar en tus ojos, como, diste una hermosa palabra esta mañana acerca de ser un extraño entrando y teniendo una palabra, quería ver si tenía alguna palabra para la Iglesia Católica y el momento en que estamos, lo que ve como un evangelista en la iglesia, las necesidades y el corazón de la iglesia como alguien que también ama a la novia y qué mensaje sería para nuestra iglesia hoy y las tensiones que enfrentamos.
Qué maravillosa oportunidad para presentar el evangelio a un católico romano, obviamente alguien que, en ese momento, estaba buscando una respuesta a algunas preguntas religiosas y profundas que ella tiene. Ella se ha extraviado, no solo por su iglesia, sino por el movimiento evangélico ecuménico en su conjunto. Ella tiene, de hecho, una visión equivocada sobre el cristianismo, y Francis Chan tuvo la oportunidad de presentarle la verdad.
Entonces, ¿cómo respondió Chan a esta mujer? Después de una pausa de 30 segundos o más, donde parecía que estaba tratando de canalizar algún tipo de revelación de Dios, finalmente responde:
No creo que deba responder esa pregunta. No creo que el Espíritu Santo quiera que responda esa pregunta.
“…siempre preparado para defender a cualquiera que te pida una razón para la esperanza que hay en ti.”
Las Escrituras NUNCA nos ordenan que guardemos silencio sobre el evangelio. Chan ha salido del reino de “espiritualmente peligroso” y ahora ha entrado completamente en el reino de los “falsos maestros”.
Chan dice que asiste a estas conferencias porque ama a los organizadores, y ama a las personas que vienen y quiere compartir la palabra. Pero este momento demuestra sin lugar a dudas, lo que hace que no. Nada de eso.
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